Bajo el concepto de “Ingeniería confiable” para los clientes, las áreas de operaciones de la empresa garantizan la calidad y el cumplimiento de plazos en sus proyectos de automatización y accionamiento eléctrico.
El primer acercamiento de Pedro Sepúlveda a Tunning Ingeniería fue el año 2011, cuando ingresó como practicante. Permaneció en la compañía durante dos años y una década después volvió, sumándose al subárea de ingeniería que hoy lidera.
Desde entonces se encarga de garantizar el cumplimiento de los procesos internos, bajo el concepto de “Ingeniería confiable” para los clientes y la normativa de la ISO 9001 de gestión de la calidad.
El subárea de Ingeniería es una de las cuatro que constituyen el Área de Procesos de Tunning Ingeniería, junto con las de Plataforma y Tecnología, Programación y Puesta en Marcha. Es una rama en crecimiento, desafiada permanentemente a abarcar nuevos mercados. “Estamos viviendo la quinta revolución industrial y, por tanto, buscamos aprovechar las nuevas tecnologías de automatización para simplificar y optimizar los procesos reiterativos que diseñamos”, explica Pedro, relevando el hecho de que herramientas como la inteligencia artificial no vienen a reemplazar a los trabajadores, sino que a apoyarlos.
Pedro Sepúlveda, Jefe de ingeniería y tableros en Tunning Ingeniería.
Así, han implementado proyectos de Smart Grid (redes eléctricas inteligentes que utilizan tecnología digital para optimizar la producción, distribución y consumo de electricidad de forma eficiente, sostenible y segura). Además, están desarrollando modelos 3D para soluciones especiales de diseño eléctrico y mecánico de los tableros en los que se ubica el hardware de procesos de la industria minera, forestal, de energía y otras.
“Nuestro fuerte es el diseño de tableros de PLC, HMI y comunicaciones, aunque abordamos otros requerimientos desarrollando soluciones a medida e incluso algunas metalmecánicas”, destaca Sepúlveda. Para cumplir los plazos comprometidos con los clientes se involucran desde el diseño y, luego, en la supervisión de integración, el control de calidad interno y, finalmente, en las pruebas Pruebas de Aceptación en Fábrica (FAT) “es clave estar en la misma sintonía con los jefes de proyectos de Tunning, las demás áreas backoffice y el cliente”, concluye.
